Un juez es la persona encargada de resolver y decidir el destino de un imputado, teniendo en cuenta las evidencias y pruebas presentadas en un juicio. En España son considerados como funcionarios públicos, y se caracterizan por ser personas autónomas e independientes.
Dentro de un tribunal, el juez es la persona de máxima autoridad. Son profesionales del Derecho y cuentan con la facultad de aplicar las leyes para juzgar si una persona es inocente o culpable.
Su objetivo principal es la defensa de los intereses de los ciudadanos, así como hacer cumplir las leyes y las normas de la constitución.
¿Cuáles son los requisitos para ser juez?
En España deberás superar una oposición y un curso teórico/práctico que ofrece la escuela judicial. Al superar este examen, y dependiendo de las plazas ofertadas, los candidatos pueden elegir entre ser jueces o ser fiscales.
Las oposiciones para ser juez son cada dos años. Debes tener nacionalidad española, Grado en Derecho, y no estar incapacitado para ser juez.
Las oposiciones para ser juez son unas de las más difíciles, y constan de tres exámenes. El primero, es un examen tipo test donde el aprobado depende de la media aritmética de los resultados de todos los estudiantes presentados en esta convocatoria. Los otros dos exámenes son orales y se hacen en Madrid en el edificio de la Audiencia Nacional.
En estos exámenes debemos exponer en cada pregunta un tema elegido al azar de una bolsa. Una vez conozca el tema, el estudiante cuenta con un tiempo para organizar sus ideas y la información a presentar.
¿Quién es un fiscal?
Un fiscal es un funcionario integrante del ministerio público, y es aquella persona que lleva de manera material la dirección de la investigación criminal, y a la que le corresponde desempeñar de manera directa un proceso penal.
En España, un fiscal actúa como representante de órgano único, promueve la acción de justicia en defensa de la legalidad, y actúa de manera coordinada y solidaria. Sus principales funciones son:
- Luchar por el respeto de las instituciones constitucionales.
- Ejercitar las acciones penales y civiles.
- Intervenir en un proceso penal.
- Velar por la protección de las víctimas, testigos y peritos.
Existen tres categorías de fiscales en España: la primera son los fiscales de la sala del Tribunal Supremo, quienes deben tener al menos 20 años de servicio; la segunda categoría la forman las vacantes cubiertas por abogados-fiscales por orden de antigüedad de servicio; y la tercera categoría consta de aquellos que deben ser graduados en Derecho y superar la oposición libre para ser juez.
¿Qué tienes que estudiar para ser juez?
El Grado en Derecho es un requisito ineludible para ser juez. Después, para preparar la oposición, la persona deberá estudiar alrededor de 350 temas sobre sobre la teoría general del Derecho, Derecho Penal, Civil, Procesal, Administrativo, y Mercantil, entre otros.
Para ser juez se requiere un gran esfuerzo y una amplia capacidad para afrontar el nivel de estudios.
¿Cómo ser juez paso a paso?
- Estudia Derecho.
- Obtén buenas calificaciones.
- Desarrolla vocación por el mundo jurídico.
- Estudia a fondo y prepárate.
- Presenta oposición, prestando atención a cada detalle.
- Al aprobar, ingresarás a la escuela de práctica judicial para cursar 2 años.
- Una vez finalizado este curso, formarás parte de una lista para cubrir plaza en cualquier lugar.
¿Qué tipos de jueces existen?
- Juez de la paz. Son nombrados por el TSJ (Tribunal Superior de Justicia) de cada una de las comunidades autónomas y de cada ayuntamiento. Es un juez no profesional, ya que no se le exige tener el título de Derecho. Esta persona asume cuestiones sencillas de ámbito civil, penal, matrimonios, inscripción de nacimientos, etc.
- Juez de carrera. Son funcionarios que han superado la oposición para ejercer diferentes campos jurisdiccionales. Para ello, debes ser graduado en Derecho.
- Juez convencional. Tiene el poder bajo cumplimiento de unos requisitos para mediar en problemas.
- Juez ordinario. Es aquel que ejerce permanencia sin perjuicio de traslados o ascensos.
- Juez superior. Posee la autoridad de juzgar las causas de la apelación.
- Juez de competencias. Tiene competencia para conocer y apoyar un proceso.
- Juez privativo. Es aquel que puede conocer algunos detalles y ejercer jurisdicción a ciertas personas o asuntos.
- Magistrado. Es superior a los jueces, algo que se alcanza por el tiempo de servicio. Están destinados a jurisdicciones superiores como Tribunales Superiores de Justicia.
- Magistrado del Tribunal Supremo. Es el cargo más alto de la carrera judicial. Son elegidos por un consejo general del poder judicial después de un concurso de méritos donde solo pueden participar magistrados con una antigüedad de 15 años.
¿Cuál es el perfil del candidato?
- Persona con capacidad de toma de decisiones.
- Cuenta con habilidad para la resolución de conflictos, y es organizado y analítico. Asimismo, tiene la capacidad de evaluar diferentes situaciones legales y trabajar bajo presión.
- Posee la capacidad de retener bastante información.
- Tiene habilidad de comunicación para lidiar con casos delicados y poder elaborar decisiones de manera clara.
¿Cuáles son las funciones principales de un juez?
Un juez cuenta con múltiples funciones. A continuación, señalamos cuáles son las más comunes:
- Escuchar testimonios de testigos.
- Escuchar alegatos de la defensa.
- Revisar argumentos y evidencias presentados.
- Determinar y ejecutar sentencia.
- Emitir órdenes judiciales, como de búsqueda o arresto.
- Celebrar ceremonias o expedir permisos de matrimonio.
- Conceder divorcios y ayudar a gestionar la separación de los bienes, así como determinar la custodia de los niños.
Un juez debe trabajar de manera objetiva y como intermediario siendo justo y neutral, por lo que es indispensable que se comporte de manera correcta y profesional en todo momento. También son personas que dirigen las audiencias legales y son responsables de entregar información relacionada con todos los procedimientos.
En resumen, son aquellos que aplican el Derecho de manera imparcial examinando las pruebas presentadas, contemplando cada uno de los conflictos, y estimando la consecuencia de cada uno de ellos.